Randall Collins y su microsociología radical: Cadenas de rituales de interacción.

No solamente de marketing digital vive el hombre y, en mi caso, soy sociólogo de formación, así que no es extraño que haya terminado escribiendo este tipo de post.

Si, el título es absurdamente largo, el autor probablemente desconocido y, además, términos como microsociología y “cadenas de rituales de interacción” te suenen a chino. No es para menos.

Índice

El autor.

Pero vamos a grano. Randall Collins es un sociólogo estadounidense con un amplio recorrido y con muchísimas obras en su haber, además de haber formado parte del núcleo de sociólogos que se podría llamar como el origen de la sociología del conflicto no marxista, críticos con el funcionalismo. Sea como fuere, no es un autor muy conocido en Europa más que en algunos pequeños círculos, al tener la sociología europea otros autores de referencia y diferenciarse notoriamente de la sociología estadounidense.

Me descubrió este autor mi tutor en la universidad, cosa que le agradezco enormemente, pues me ofreció un marco teórico novedoso con el que poder trabajar (pues su libro “Cadenas de rituales de interacción” se publicó originalmente en el 2004 y a España llegó muy posteriormente).

La microsociología de Randall Collins.

Randall Collins, como ya he dicho, pudo encuadrarse en su momento en el origen de la sociología del conflicto no-marxista, si bien fue desarrollando a lo largo del tiempo un interés y unas teorías que, sin separarlo de esa escuela, lo especializaban en la microsociología.

La microsociología es una parte de esta ciencia con cierta mala prensa, pues por norma general a los sociólogos les gustan las grandes dimensiones y los análisis estructurales más que los enfoque micro. De hecho, probablemente por ello muchos teóricos de la sociología sientan cierta aversión a la psicología y visiones mas individualistas del comportamiento social.

En este aspecto Randall Collins rompe con ese patrón y se interesa enormemente por lo más pequeño de la sociología, las interacciones sociales entre los diferentes individuos, y genera un enfoque de lo pequeño a lo grande, de lo micro a lo macro, de lo cotidiano a lo estructural.

Seguir este camino no es fácil, pues como ya he dicho, existen ciertas reticencias a ello en el mundo académico, que siempre tiende a “mirar en altura”, de arriba abajo, nunca al revés. Por ello la toda la teoría de los sistemas en sociología puede tener mucho más interés, pues es prácticamente una “teoría total” que no se adentra en lo más pequeño pero intenta explicarlo todo.

Cadenas de rituales de interacción.

Collins tiene muchos libros, pero en este caso me gustaría ceñirme a su “Cadenas de rituales de interacción”, publicado en 2004 y que, en mi humilde opinión, articula una teoría microsociológica con una potencialidad única, pues puede explicar fenómenos sociales diversos desde lo más pequeño y, no rechaza categorías de análisis de otras escuelas sociológicas, siendo una teoría muy flexible, aunque quizás también debido a que dicha teoría puede ser más un esbozo muy bien hilado y no tanto una teoría desarrollada su máximo nivel. Pero en cualquier caso no deja de ser una novedad dentro de la sociología que merece atención.

Esta teoría puede explicar desde la estratificación social, los movimientos sociales, relaciones de pareja e incluso entrar en la sociología del deporte sin ningún tipo de complejo, pues al basarse la teoría de Collins en la interacción social y ser casi todo comportamiento humano e institución social eminentemente un conjunto de interacciones sociales, tiene siempre una fenomenología de la que obtener la causalidad de los diferentes avatares.

Y ahora vayamos propiamente a la teoría de Collins en su “Cadenas de rituales de interacción”.

En primer lugar debemos definir qué es un ritual de interacción o interacción ritual(la traducción española no fue realmente certera en la traducción) según Collins.

Y partiendo de que todos sabemos qué es una interacción social en general, debemos definir la interacción ritual con los requisitos:

  • Presencia física de dos o más sujetos.
  • Separación física respecto a otros.
  • Compartir un foco de atención.
  • Estado emocional compartido(sentir lo mismo).

Estas son las premisas en las que se basa Collins para definir qué es y qué no es una interacción ritual.

Pondremos dos ejemplos:

Una cita de una pareja. Hay una presencia física de dos sujetos. Hay una separación física entre ellos y los demás. Comparten el mismo foco de atención(el uno al otro y a ellos mismos como pareja). Y, en principio hay un estado emocional similar.

Otro ejemplo. Aficiones de un equipo de fútbol durante el partido. Hay una presencia física de dos o más sujetos. Están separados del resto al estar dentro de un estadio y, además, separados de la afición rival. Comparten el mismo foco de atención, que es el campo de juego. Y finalmente el estado emocional es también similar.

Ambos casos son interacciones rituales según la teoría de Collins. Cumplen cada uno de los requisitos, como otros muchos casos que podemos imaginar, así que prosigamos con la teoría.

Estas interacciones rituales pueden ser positivas o o frustradas, para ser fácil de comprender. Todo aquella interacción ritual positiva genera una energía emocional(término de Collins) que genera en los miembros partícipes de dicho ritual, los siguientes efectos:

  • Solidaridad grupal.
  • La energía emocional colectiva generada afecta a cada uno de los individuos.
  • Se crean símbolos compartidos por esos mismos sujetos.
  • Del mismo modo,se pueden sacralizar objetos,lugares, etc, derivado del punto anterior.
  • Se producen pautas de moralidad entre los sujetos. Se forja un código moral reconocido y respetado por los miembros de esa interacción ritual.
  • Derivado del punto anterior, se juzga y castiga toda transgresión de ese código.

En mi opinión personal, esa teoría lo que ofrece es un marco teórico fuera de serie para explicar procesos de formación y destrucción de identidades. Puesto que no es difícil de ver que la teoría de Collins encaja perfectamente con la explicación de procesos de creación de identidades grupales. Identidades grupales que pueden engendrar multitud de procesos derivados, pero muy principalmente explica la génesis de una identidad grupal.

Con los mismos ejemplos que he dado para entender qué hace falta para que una interacción sea interacción ritual según Collins, podemos entender esta segunda parte de la teoría.

La cita de una pareja, por ejemplo. Si la cita es satisfactoria, la energía emocional en ambos sujetos comienza a engendrar sentimientos de lealtad, de identidad común, pautas de moralidad y comportamiento que ambos sobreentenderán con el transcurso de la relación y se generarán símbolos y objetos o lugares sacralizados que solo los miembros de la pareja podrán entender.

Del mismo modo, la transgresión del código compartido, puede generar una respuesta sancionadora.

O utilicemos el caso de los aficionados al fútbol. Si la interacción ritual es positiva, el equipo gana y no hay problemas en el transcurso del partido, los aficionados se sienten más unidos, más parte del equipo. “Sienten más los colores”. Además, criticar al equipo cuando ha ganado se vuelve algo merecedor de sanción. Y si se llegase a ganar algo importante, se podrían generar símbolos, un jugador, el estadio. Para que todos los españoles lo podamos entender, si cito “el gol de Iniesta”, todos entendemos lo que quiero decir y automáticamente recordamos un momento de unidad de energía emocional compartida en nuestras casas, incluso estando separados físicamente, pero con el mismo foco de atención y desarrollando el mismo símbolo que ahora compartimos.

Bien, creo que así se puede entender perfectamente la teoría de Randall Collins. El encadenamiento de esas interacciones rituales es lo que genera y produce el devenir social y muchos de los fenómenos que vivimos. Una sola interacción ritual puede ser importante, pero son su conjunto, su encadenamiento, lo que define.

Es más, solamente he hablado de interacciones rituales positivas, pero cuando las interacciones rituales fracasan, también generan consecuencias. Del mismo modo que la afición de fútbol ganadora desarrolla todo ese tipo de rasgos que he descrito, la afición del equipo perdedor, puede perder compromiso, lealtad con el equipo, la crítica está tolerada y en general hay un debilitamiento de los lazos sociales. Si eso se mantiene en una cadena, como bajar de categoría después de muchos partidos perdidos, pueden producirse a baja de los socios, críticas descarnadas, vergüenza de pertenecer a dicho equipo y todas las consecuencias que conocemos.

En una pareja romántica igual, cuando se encadenan interacciones rituales positivas, la pareja se mantiene y puede mejorar su relación. Si, por el contrario, se producen una serie de interacciones rituales frustradas, transgresiones de la moralidad compartida, etc, la pareja puede debilitarse lo suficiente para entrar en una deriva destructiva que termine por acabar con la pareja.

Como vemos, la teoría de Randall Collins puede explicar dinámicas sociales a través de la interacción de los sujetos de una forma muy interesante y es una teoría muy infrautilizada teniendo en cuenta toda su potencialidad.

Con esto me despido. Hala majos.

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